Lo tuyo es puro sexo

Visto y comprobado: las mujeres hablan hasta tres veces más que los hombres, en un promedio de 20.000 palabras diarias, frente a las 13.000 que emiten los varones. No, no es que me haya dedicado en mis ratos libres, pocos por cierto, a contar las palabras que salen de la boca de los seres humanos. Para eso, ya tenemos al doctor Luan Brizendine, quien se ha encargado de realizar un estudio que habla de la facilidad de hombres y mujeres para la comunicación, los sentimientos y el sexo.

La causa de esta situación hay que buscarla, según este experto, en la matriz donde la hormona sexual de la testosterona moldea el desarrollo del cerebro masculino.Las áreas dedicadas a la emoción, la comunicación y la memoria se sitúan en la parte trasera del cerebro masculino. Por ello, el cerebro de las mujeres tiene como una especie de autopista de ocho carriles para la tramitación de las emociones, mientras que los hombres un pequeño caminito. Esto provoca que ellos sean más fuertes y silenciosos, algo bueno debíamos de tener, ya que no somos tan buenos comunicadores.

Además, Brizendine, que tiene nombre de medicamento, asegura que el cerebro del hombre es como un procesador de sexo, cuyas áreas responsables de los pensamientos sexuales es dos veces mayor que en las mujeres. Dicho de otra forma, volviendo a los símiles de infraestructuras de comunicación, "los hombres tienen un aeropuerto internacional para hacer frente a los pensamientos sobre sexo mientras que las mujeres tienen un aeródromo con pequeños aviones privados". Mucho más claro, ahora.

Unas revelaciones que no descubren la penicilina, vamos, que esta carretera ya estaba construida y muy transitada cuando este psicólogo ha realizado el estudio. De sobras conocido es para todos que los hombres son mucho más sexuales que las mujeres, o al menos en lo que a pensamientos se refiere. Lo que Luan sí hace es cronometar el tiempo que dedican uno y otro a pensar en cuestiones sexuales. Mientras que los hombres piensan en eso cada 52 segundos de su vida, las féminas sólo una vez al día. Por esta regla de tres la vida del hombre es puro sexo, si en menos de lo que dura que un minuto ha tenido un pensamiento al respecto. Revelador.