Entre que mete la nariz donde no le importa y que no para de meterse donde no lo llaman, el Vaticano tiene tiempo hasta de hacer estudios. ¿Sabían que los hombres y mujeres son muy distintos hasta en lo que a pecar se refiere? Pues la Santa Sede ha presentado un informe en el que se estudia cuáles son los pecados capitales más comunes en ambos sexos.
El artífice de este informe es un jesuita de 95 años, que debía de estar aburrido en casa mientras veía la misa de los domingos.Elbuen hombre inquieto se ha documentado en las confesiones de un centenar de personas, tanto hombres como mujeres. Ya que es en este ámbito, el confesionario, donde los seres humanos siempre han confesado sus pecados. Aunque ahora lo hagan en el Tuenti, sus blogs o fotologs, respectivos.
Como no podía ser de otra manera, el principal vicio de los hombres es la lujuria. ¿No se han fijado en las miradas lujuriosas que llevan siempre los hombres marcadas en sus rostros? Le sigue la gula, ya que nunca están satisfechos y por eso son tan ansiosos y siempre quieren mas; pero les pierde la pereza y lo quieren todo hecho, mientras ellos sólo tienen que sentarse en el sofá y quítame aquí estas pajas; y cuando no lo consiguen, se llenan de ira y soberbia. Nunca dan su brazo a torcer: ellos son los machos dominantes; y envidian a los hombres que lo tienen todo, además de grande, y avarician tenerlas ellos mas grande.
La lujuria no es, sin embargo, uno de los principales pecados capitales en la mujer. Se conforma con ocupar el cuarto puesto, detrás de la soberbia(ellas sí que no se mojan el culo para comer peces, aunque se mueran de hambre), la envidia que les corroe cuando ven que hay otras féminas que sí se mojan y comen; lo que las llena de ira y terminan como unas auténticas perezosas; total si ya hay otras que se comen to el pescado que se ha vendido...
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