Siempre he defendido la postura de que vivimos en un mundo muy falocéntrico, es decir, dominado o que gira en torno al falo humano. No, no es una exageración, ni tampoco algo propio de la comunidad homo. No, sólo hay que desplazarse a la vecina África, donde el pene ha sido motivo de una buena tangana que acabó en tragedia.No hablo en broma ni es un asunto baladí. Cuatro personas han sido detenidas, entre ellas dos polis suspendido, por un tiroteo que acabó con tres muertos y cuyo origen estuvo en una discusión originada por el tamaño del pene de uno de los implicados.
Como lo oyen, si pensaban que los gays somos los únicos que intentamos verle la churrita al que mea al lado nuestra cuando entramos en un baño público, no es así. En los baños de una taberna de Kwazulu Natal (al lado de Lebrija, vamos), durante el descanso de un partido de fútbol, una broma de dos hombres sobre el tamaño del pene de su partener de meada provocó todo este guirigay. Vamos, que le vieron el pito al susodicho y, desconozco como la tendría el hombre, no debió de gustarle mucho el elemento. Total, que este, super ofendido (a los hombres no hay que tocarle, metaforicamente, ese punto, si no es para decirle ¡qué grande la tienes!) comenzó a insultar a sus "agresores verbales" y así se inició todo. Y me pregunto yo, que hace mucho que no lanzo campanas al vuelo, ¿Los negros sudafricanos no dicen que la tienen muy grande?
Sea como fuere, el tamaño, en este caso, importó, aunque, desgraciadamente, para iniciar una pelea. Con lo fácil que hubiera resultado terminar con una de esas frases tontas pero que quedan gtan bien o al menos te consuela del tipo de "Si lo importante no es el tamaño, sino saber usarla". Y se hubiesen tomado otra cañita...
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