Quién me compra un quince mil...

Aquí el que no está loco anda pegando pellizco a los cristales. Leo hoy en la web www.poprosa.com, Pagan porque los Jonas Brother pierdan la virginidad. Para los que como yo no sepáis quienes son estos hermanos Jonas, al parecer, son el último grito, musicalmente hablando, en lo que a fenómeno fan se refiere. Tres chavalitos guaperas o resultones, con cara de pubertad y mirada de malas intenciones, que ya cuentan con un regimiento de quinceañeras y sus respectivas madres que montan el pitote y les gritan vayan donde vayan,
Una vez contextualizado a estos muchachos, volvamos al quid de la cuestión. Según la información aparecida en este portal de cotilleos de sociedad, una emisora de radio de Michigan ha ofrecido la friolera cifra de 10.000 dólares a aquella persona, no especifica chico o chica, que logre robarle la virginidad a uno de los hermanos. Parece ser que la emisora tiene a uno de ellos en el punto de mira, concretamente a Joe Nick, el más jovencito de los tres, de 15 años de edad
Recapitulemos, un medio juega o e inmiscuye en algo tan íntimo y personal como es la virginidad o la vida sexual de una persona, comercializando con ella e incitando a una legión de chicas desquisiadas a que se lancen sobre este muchacho y hagan flis-flis en cualquier concierto o evento musical de los Jonas Brother. Sin que olvidemos que estamos hablando de un menor de edad. ¿Qué opinarán sus padres?
Además del morbo de su corta edad, la dificultad de la apuesta, además de ser una estupidez innecesaria, reside en que estos niños han declarado que tienen la intención de llegar vírgenes al matrimonio. Una opción tan respetable como otra cualquiera y que nadie tiene por qué truncar. Esto es como las ridículas apuestas de universitarios americanos(no es que tenga nada contra ellos, pero lo visto muchas veces en las pelis) que se apuestan altas sumas de dineros para ver si logran desvirgar a cualquier rubia americana; o las chicas, por poner un ejemplo, que se juegan algo a que logran acostarse con un tío que está muy bueno pero que resulta que es gay.
En fin, que ya imagino a cientos, miles de muchachitas descocadas de ciudad en ciudad persiguiendo a Joe Nick para robarle la flor de su virginidad. Aunque, ahora que caigo, a lo mejor al chico le gusta la idea...