Dios te salve María... Amargura

Terminó el día del estreno, de la ilusión, de las ansias de ver pasos en la calle al son de una marcha y acompañado por una buena chicotá. Terminó la jornada d ir con prisas, aprovechando el último segundo para llegar raudo y veloz de uno a otro punto de la ciudad para ver la siguiente cofradía. Dia de endomingados y endomigandas, que anteponen a la comodidad de disfrutar de la Semana Santa las ansias de estrenar e ir monos o monas; ellos con sus modelitos JVZ o H&M, pantalones blancos(están de moda) y camisas con o sin corbatas bastante estridentes(rosa fucsia o verde pistacho); ellas con sus modelitos y taconazos, de los que acaban hasta el mismísimo uno vez que avanza la jornada y el radiante sol de domingo da paso a la tenebrocidad de una madrugada d Lunes Santo.
Ayer fue día, además de jornada laboral para el que les rubrica, de Cautivo en Dos Hermanas, a la salida. Cofradía con sabor de barrio, de pueblo con ansias de ciudad, que mira a la capital para imitar y absorber hasta el último detalle. Día de Paz, en Sevilla y esperemos que en el mundo, a su paso por Puerta Jerez. Nunca antes una hermandad brilló tanto como esta del Porvenir, tanto por del nuevo dorado del señor de la Victoria, como por la blancura inmaculada y el rostro cándido de la virgen de La Paz.
Jornada para descubrir un punto nuevo: Jesús Despojado(la hermandad de mi barrio, que no tiene tres pasos) en la revirá entre Zaragoza y Fray Bartolomé de las Casas. Imposible que lo pasos entren por esa callejuela tan estrecha, pero entran, os lo aseguro, porque yo destuve allí.
Día de Estrella por su Baratillo, que dicen que es el barrio más trianero de Sevilla, que recibe cada Domingo de Ramos a la que decían que era la hermandad más sevillana de Triana. Decían, porque viendo al Cristo delante de la capilla de la Caridad aquello olía a Triana pura y dura, como la salida d La Estrella del Arco del Postigo, mientras la banda le cantaba aquello de "Dios te salve María" o su avanzar, elegante y con arte, por la calle Arfe a los sones de Esperanza de Triana Coronada.
Y nada mejor para terminar la jornada que Amargura en Cuesta del Rosario. La elegancia personificada de una dolorosa bajo palio, con San Juan, que hipnotiza a su paso, tanto por la visión como por su acústica. Nunca sonó tan bien la marcha que lleva su nombre como suena cuando se la tocan a la Amargura en la madrugá ya del Lunes Santo,